martes, 1 de abril de 2008

A SALTITOS



Ella decidió vivir la vida así. Sin preocupaciones, haciéndose el camino más fácil.


Le encanta dar largos paseos, escuchar todo lo que tiene que decirse y jamás se siente sola.
A veces, hace un alto en el camino para descansar y mirar toda la naturaleza que la rodea, le gusta salir corriendo por el campo y pasear sus brazos por los trigales, mientras cierra los ojos y un rayo de sol le da en la cara. Se tumba para respirar hondo y cuando encuentra una mariquita, acerca su mano para que ésta vaya a ella. Una grata sensación invade su ser por completo
. Su cuerpo es tan pequeño, pero su espíritu tan grande que no encuentra sitio en el pecho para tanta satisfacción.
Una suave brisa veraniega sopla descarada por debajo de su falda, que le devuelve el aliento que la carrera le había arrebatado momentos atrás. Se pone en pie y vuelve al camino.


Dice que le gusta andar descalza por la carretera, presiente que todo está más vivo y le gusta sentir el calor que desprende en sus pies, es algo sensacional. La carretera – piensa ella – es como la vida, a veces el camino es fácil, llano y cuesta abajo, otras, te puedes encontrar con grietas, baches y piedrecitas que entorpezcan tu camino. Por eso ella vive a un palmo del suelo, por si se cae, volar de nuevo (ADREDE) Y no le importa que las plantas de sus pies se pongan negras, se ríe y disfruta del momento.

3 comentarios:

miguel dijo...

Angela Chapó

Que comentar que no este impregnado en esos renglones que han aterrizado tras el vuelo de ideas que has dejado secar tras escribir con esa tinta fresca y ese corazon caliente.

un beso

Manuel Rubiales dijo...

A volar, siiii, a volar, sin alas donde todo es cielo...

Girasol dijo...

MIGUEL Y MANOLO: Vuela amigo, vuela alto, no seas gaviota en el mar, la gente tira a matar cuando volamos muy bajo....

Eeeeeea!

jajajaajaja.